Traemos aquí un nutrido grupo de figuras de ángeles tenantes y mancebos que, vestidos al estilo barroco con casaca, medias y calzón bombacho, lo cual nos puede informar aproximadamente sobre su datación, fijándola alrededor del siglo XVIII, o principios del XIX.
La colección se trata, quizá, de piezas de origen popular granadino que perteneciese a la devoción conventual o acompañase a otro nutrido grupo de figuras. Quizá de un Nacimiento popular, a modo de coro celestial que acompañe al Misterio.
Esta peculiar colección de ángeles, realizados en barro cocido y policromado, llegó con importantes y severas patologías. La multitud de faltantes y roturas, así como la suciedad acumulada durante años, eran las principales alteraciones que poseían.
Presentaban, además, gran cantidad de alambres y otros elementos metálicos (tornillos y cáncamos) utilizados para su sujeción y exposición en distintos montajes. Dichas piezas añadidas dañaban el material original al contaminarlas con oxidación y manchas de herrumbre, además de crear roces y erosiones. En algunas zonas se alteraba la percepción del cromatismo original, puesto que se habían realizado repintes de forma burda.
Se planteó, a modo sumarial, el siguiente planteamiento ante la recuperación de estas piezas:
- Limpieza mecánica de las piezas.
- Consolidación puntual con resina acrílica en dispersión acuosa a baja proporción, tipo Acril 33.
- Eliminación de elementos metálicos inservibles.
- Limpieza físico-química, utilizando bisturí y disolventes tales como jabón neutro en disolución acuosa a baja proporción, neutralizando con agua desionizada.
- Limpieza puntual de repintes mediante disolventes, previo test de solubilidad.
- Barnizado protectivo del estrato original de las obras.
- Restitución de los faltantes anatómicos, modelados en pasta con base de carga inerte y aglutinada con resina acrílica en base acuosa.
- Restitución de las alas faltantes mediante moldes de silicona de las originales, positivadas en resina acrílica.
- Reintegración cromática con colores al agua.
- Barnizado final y retoque cromático con pigmentos al barniz.
Finalizadas las piezas, acompañaron el 15 de agosto al montaje de la Virgen del Tránsito que se monta en la Iglesia conventual del Santo Ángel, en la ciudad de Sevilla, junto al resto de ángeles de la colección.
Comentarios
Publicar un comentario