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Mostrando entradas de abril, 2020

Camino del Rocío

Grafito sobre papel rosaspina 32 x 22 centímetros

María Santísima de las Aguas.

Grafito y pan de oro sobre papel gris. 29 x 19 centímetros

Dibujo de Ntra. Sra. de la Hiniesta Gloriosa (Sevilla).

El pasado año 2018, D. Juan Manuel Labrador pronunció el Pregón de las Glorias de Sevilla en la Catedral hispalense. Para la ocasión, tuvo a bien contar con la ayuda de distintos artistas plásticos entre los que, humildemente, me incluyó para ilustrar el libro de dicho pregón. Me fue otorgada la tarea de realizar una ilustración sobre la talla de la Virgen de la Hiniesta Gloriosa,  tallada en 1945 por el imaginero Antonio Castillo Lastrucci para sustituir la imagen original desaparecida en el incendio provocado de la Parroquia de San Julián en 1932. La ilustración se realizó sobre papel rosaspina beige, con lápices acuarelables, tinta y pan de oro.

Niño Jesús sobre cuna, de estuco.

Este particular Niño Jesús de 60 centímetros de altura total, sentado sobre la cuna, es una peculiar representación del mismo ideada y salida de los talleres olotenses, muy populares el pasado siglo. Es un molde poco extendido y conocido, puesto que difiere de la clásica representación del Niño yacente, en actitud de bendecir, que sigue siendo popular y estando presente tanto en templos como en casas particulares durante la Navidad.  Este Niño, en cambio, aparece sentado sobre un pesebre de paja, con tres palomas a sus pies, vestido con un pequeño paño blanco que le rodea el cuerpo a modo de toga. A continuación mostramos el original de la imagen de archivo de la fábrica El Arte Cristiano (extraída de su web  www.elartecristiano.com ), única que sigue en activo hoy en día de entre las muchas que se crearon en esta localidad catalana el pasado siglo XX. Nuestra pieza carece de la tercera paloma, la cual se ha perdido y sólo resta el roto donde reposaba a los pies del infant

Conjunto de ángeles de barro.

Traemos aquí un nutrido grupo de figuras de ángeles tenantes y mancebos que, vestidos al estilo barroco con casaca, medias y calzón bombacho, lo cual nos puede informar aproximadamente sobre su datación, fijándola alrededor del siglo XVIII, o principios del XIX. La colección se trata, quizá, de piezas de origen popular granadino que perteneciese a la devoción conventual o acompañase a otro nutrido grupo de figuras. Quizá de un Nacimiento popular, a modo de coro celestial que acompañe al Misterio. Esta peculiar colección de ángeles, realizados en barro cocido y policromado, llegó con importantes y severas patologías. La multitud de faltantes y roturas, así como la suciedad acumulada durante años, eran las principales alteraciones que poseían. Presentaban, además, gran cantidad de alambres y otros elementos metálicos (tornillos y cáncamos) utilizados para su sujeción y exposición en distintos montajes. Dichas piezas añadidas dañaban el